GUÍA DEFINITIVA DE EJERCICIOS DE BAJO Y ALTO IMPACTO
Nuevo año, nuevas metas de salud y la intención de realizar actividades que nos alejen del sedentarismo. Vitality, te recuerda que treinta minutos de ejercicio de moderada intensidad en casi todos, o todos los días de la semana, es lo mínimo que nuestro cuerpo necesita para estar en una condición de bienestar. Si bien regresar al gimnasio todavía puede sonar arriesgado, ya sabemos que cualquier espacio puede adaptarse para realizar nuestra práctica.
Definamos “impacto” como la fuerza que se ejerce sobre huesos y articulaciones a través de algún tipo de actividad física. Según el American Council of Exercise, los ejercicios de bajo impacto, son movimientos fluidos y más suaves con las articulaciones, los huesos y los tejidos. Entre ellos están: natación, pilates, yoga, paseo en bicicleta, caminar, etc.
Los de alto impacto, requieren más esfuerzo físico al alejarnos del suelo durante el rango de movimiento, lo que causa que el peso caiga sobre huesos y articulaciones al aterrizar. Algunos ejemplos son: correr, practicar fútbol, entrenamiento HIIT, etc. Como suponen mayor intensidad cardiovascular, normalmente queman más calorías que los de bajo impacto, y por esa razón suelen ser los preferidos de las personas que están buscando perder peso. En este punto, cabe recordar que el factor determinante para eliminar las libras demás, es el déficit calórico, es decir ingerir menos calorías de las que gastas.
¿CUÁL ELEGIR?
Sin haber experimentado lesiones previas o condiciones específicas determinantes, sobre todas las cosas, elige el que te haga sentir a gusto. Como lo sugirió un estudio del Journal of Sport Science and Medicine, si lo disfrutamos, seguramente lo practicaremos de manera constante a lo largo del tiempo.
Si eres principiante o tomaste un descanso y quieres retomar el ejercicio o el deporte, hacerlo con actividad de bajo impacto te ayudará a conseguir estado físico, evitando lesiones. Si lo tuyo son exclusivamente las rutinas de alto impacto, ten en mente que el exceso de este tipo de ejercicio, podría ocasionar lesiones o enfermedades.
Entonces, el equilibrio es la parte más importante del proceso. No olvides que la salud es el bienestar físico, mental y social, por lo que no es recomendable priorizar únicamente el entrenamiento, sino también la alimentación, el descanso, las actividades de recreación, etc.
Al pensar en hacer cambios en tu rutina de ejercicios, siempre es una buena idea consultar con un profesional de la salud, quien estará en capacidad de recomendar de manera personalizada, las opciones adecuadas, para que te mantengas saludable y seguro mientras ejercitas.
HEALTH TIP
Los beneficios de cada uno son diferentes, pero siempre al practicar ejercicio, te proponemos incorporar actividades tanto de bajo, como de alto impacto. ¡Ya verás cómo los disfrutas!
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